Suelos de gran belleza que encierran una gran fortaleza



Suelos de gran belleza que encierran una gran fortaleza


Hoy hay en el mercado tantos materiales diferentes para los suelos de casa que muchos se apuran a retirar clásicos como la tarima flotante acusándola de ser demasiado delicada o de no ser muy realista en sus acabados.

Pero , desde luego, no todas las tarimas son iguales ni pueden meterse en el mismo saco, las hay que están a la altura de las últimas innovaciones del mercado y que superan los niveles de exigencia más altos.

¿Conoces la tarima Pergo? Estamos hablando de una de las tarimas de más calidad del mercado cuya belleza compite con la de la madera y que son un gran ejemplo de lo que estamos hablando.


Tarimas de gama alta


Uno de los problemas de los suelos de tarima flotante es que cuando comenzaron a salir al mercado no eran demasiado baratos. Un suelo de gama alta era caro, sobre todo si se hacía la cuenta de lo que costaba comprar el suelo, la base y el rodapié. Para conseguir abaratar el precio muchos consumidores optaban por comprar suelos más económicos y utilizar bases menos aislantes.

Pero hoy no es necesario hacerlo porque un suelo de gama alta puede encontrarse por muy buen precio y los aislantes que se colocan debajo son mucho mejores que los antiguos y también resultan más económicos.

Sobre todo, hay que tener en cuenta que un suelo de gama alta dura muchísimo más tiempo que uno de gama media o de gama medio baja. Por eso, ahora más que nunca la diferencia de precio es fácil de amortizar y compensa más que nunca pagar un poco más por algo que va a estar en nuestros suelos muchos años.


Acabados muy realistas y nuevos colores


Si las tarimas flotantes siempre tuvieron acabados que imitan muy bien a la madera natural, las actuales, especialmente las de gama alta, son todavía más perfectas. Ahora, se adecuan más a los nuevos gustos en los que han comenzado a aparecer maderas en tonos que hasta ahora no eran mu
y vistos, como las maderas con acabados grises o los marrones muy oscuros, de los que antes se tendía a escapar y que ahora se han puesto de actualidad.

  Estos suelos oscuros, lejos de restar luminosidad a la habitación, permiten jugar con los contrastes con paredes en colores muy claros, ofreciendo una elegancia muy especial que recuerda mucho a los parquets de madera clásicos.

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